Juste Pressé se impone en el concurso organizado por TGV, el tren de alta velocidad galo, para suministrar en ellos los primeros zumos refrigerados en envases ecológicos y libres de plásticos del mercado procesados con tecnología de altas presiones. La tecnología HPP In-Bulk de Hiperbaric procesa bebidas a granel antes de su envasado final, y permite apostar por packaging sostenibles y ecológicos. El contrato establece el suministro de 500.000 zumos de 250 ml en Tetra Pack (el servicio de tren de alta velocidad francés eliminó a inicio de año todos los envases de plástico y solo ofrece alimentos y bebidas sostenibles) hasta finales de este año, con previsión de renovación.
La tecnología española de Hiperbaric, empresa burgalesa líder mundial en tecnología de alta presión, permitirá -a través de su cliente Juste Pressé– a los pasajeros del servicio de tren de alta velocidad francés (TGV) tomar zumos refrigerados en envases ecológicos y libres de plásticos procesados con la tecnología por altas presiones (HPP) In-Bulk.
Juste Pressé suministrará al TGV 500.000 zumos de 250 ml en envases de cartón hasta octubre, con previsión de renovar el contrato más allá de esta fecha. El acuerdo firmado entre Juste Pressé y TGV responde a la decisión que los responsables del servicio de tren de alta velocidad francés tomaron a inicios de año para dispensar exclusivamente en los vagones productos locales y respetuosos con el medio ambiente, eliminando las botellas y
envases de plástico, y dando así respuesta a la demanda social que reclama productos más sostenibles.
Esta tecnología concreta de procesado de altas presiones (HPP) introduce algo pionero que se emplea por primera vez: la tecnología In-Bulk permite procesar bebidas a granel antes de su envasado final y utilizar packaging sostenibles y libres de plásticos, manteniendo todas las ventajas de las HPP. Hasta ahora todas las máquinas HPP tenían la limitación de que, para procesar los alimentos, había que envasarlos anteriormente en envases de plástico, pero la tecnología Hiperbaric HPP In-Bulk hace que sea posible someter a los líquidos a altas presiones en una gran cámara de procesado o vasija y envasarlos posteriormente en paquetes sostenibles como el cartón o Tetra Pak.
El poco espacio que existe en los trenes y la necesidad de mantener a baja temperatura los zumos refrigerados había llevado a los responsables del TGV a descartar hasta el momento el suministro de esta bebida en sus vagones. Sin embargo, la calidad de los zumos Juste Pressé y su larga vida útil, gracias al procesado por altas presiones, les ha hecho cambiar de idea. “La excelencia de nuestros zumos procesados con la tecnología Hiperbaric HPP In-Bulk superó las limitaciones que existían de espacio refrigerado en los trenes y convenció a los responsables del valor de ofrecer un producto saludable, sin conservantes ni colorantes, y sostenible por su envase TetraPak exento de plásticos”, explica Alexia Chassagne, fundadora y presidenta de Juste Pressé.
Por su parte, Andrés Hernando, CEO de Hiperbaric, califica esta tecnología de “innovación mundial” al permitir el uso de cualquier tipo de envases después del procesado HPP, “con independencia del material, diseño o tamaño”, lo que le ha permitido a la francesa Juste Pressé ganar el contrato. “Nuestra tecnología Hiperbaric HPP In-Bulk ha hecho posible a Juste Pressé lanzar el primer zumo HPP del mundo en envase Tetra Pak, de lo que estamos enormemente satisfechos”, añade.
Ventajas del procesado por alta presión (HPP)
El procesado por altas presiones (HPP) prolonga el periodo de conservación de los alimentos, manteniendo sus características nutritivas y sensoriales y eliminando la utilización de conservantes y colorantes. Es un método que se basa en aplicar altos niveles de presión por el agua de hasta 6.000 bar durante unos segundos o minutos, lo que consigue inactivar los microorganismos responsables del deterioro de los alimentos y conservar las características nutricionales del producto fresco.
Esta tecnología da respuesta así a la creciente demanda social que reclama productos sin aditivos, que no se comen de manera aislada pero que se agregan a los alimentos para mejorar su conservación o sus propiedades organolépticas.
La técnica de conservación por presión en frío sustituye los conservantes y colorantes o tratamientos térmico y químico manteniendo sus valores nutricionales y organolépticos. Asimismo, alarga su vida útil permitiendo su exportación a nuevos mercados y contribuyendo a reducir el desperdicio de alimentos.
La implementación de esta innovadora tecnología viene experimentando un constante crecimiento en los últimos años, sobre todo en Norteamérica donde se localiza el 47% del mercado. Europa copa un 25% del mercado global, seguido muy de cerca por Asia que genera el 16% de negocio. Sudamérica y Oceanía representan cada uno el 5%, y la presencia en África de esta tecnología es testimonial con un 1% de mercado.