Con las recientes noticias sobre retiradas de alimentos, parece que 2024 ha sido un año ajetreado para la industria alimentaria. Sin embargo, las autoridades internacionales de seguridad alimentaria llevan años ocupándose de este tipo de medidas preventivas para proteger a los consumidores. Desde la contaminación bacteriana hasta los alérgenos no declarados, hoy en día la industria alimentaria se enfrenta al reto de cumplir las medidas de seguridad más estrictas. Una solución emergente que destaca por su eficacia es el procesado a alta presión (HPP). En esta entrada del blog, exploraremos las principales notificaciones de retirada de alimentos de 2024 y examinaremos cómo el HPP ofrece una solución viable para minimizar estos riesgos en el futuro.
¿Qué puede provocar la retirada de alimentos?
Los alimentos pueden ser retirados por varias razones, por ejemplo, por contaminación con patógenos como Listeria o Salmonella, que pueden provocar intoxicaciones alimentarias, o por defectos de fabricación, como la presencia de plástico o metal en el producto. La información incorrecta o inexistente sobre alérgenos también puede dar lugar a una retirada de alérgenos.
2024: Balance de un año
Las recientes retiradas de alimentos subrayan la importancia de la vigilancia y la trazabilidad en la industria alimentaria. Veamos algunos datos de este año.
En Estados Unidos, las agencias de seguridad alimentaria FDA y USDA han registrado un total de 229 notificaciones. La presencia de alérgenos en productos alimenticios y bebidas domina las retiradas de alimentos. Casi la mitad de las retiradas de alimentos y bebidas notificadas por la FDA (41,6%) están relacionadas con alérgenos no declarados en los envases, mientras que otros motivos importantes de retirada son la contaminación por Listeria (22,7%), la contaminación por Salmonella (13,5%) y otros peligros químicos como metales pesados u otros contaminantes (13,5%; Figura 1). Otras causas de retirada de alimentos en este país son la presencia de cuerpos extraños, condiciones insalubres o errores de etiquetado (no relacionados con alergias).
En Europa, se tarda un poco en contar y clasificar la friolera de 3853 notificaciones alimentarias comunicadas este año (RASFF Window, octubre 2024). Esto representa un descenso del 8% con respecto a 2023, que registró el mayor número de notificaciones desde 2020.
Si entramos en las categorías, los residuos de plaguicidas (797 notificaciones), los microorganismos patógenos (728) y las micotoxinas (446) son las principales categorías de peligro notificadas (Figura 2). Dentro de las notificaciones relacionadas con bacterias patógenas, siguiendo la misma tendencia que en 2023, Salmonella es el microorganismo patógeno más frecuente (468), seguido de Listeria monocytogenes (147), norovirus (56) y Escherichia coli (47).
Estas retiradas no sólo amenazan la salud de los consumidores, sino que también dañan la reputación de las marcas y provocan importantes pérdidas económicas a las empresas. Esto plantea la siguiente pregunta: ¿Cómo podemos proteger mejor tanto a los consumidores como a las empresas?
La ventaja de la alta presión en frío o HPP
La alta presión en frío o HPP está ganando reconocimiento como una tecnología eficaz que garantiza seguridad alimentaria. A diferencia de los métodos tradicionales de conservación de alimentos, HPP aplica altos niveles de presión en lugar de calor, lo que garantiza la eliminación de microorganismos nocivos sin alterar el sabor, la textura o el valor nutricional de los alimentos.
Además, gracias a su versatilidad, la tecnología HPP se puede aplicar en un amplio abanico alimentos y bebidas, como zumos, guacamole y salsas, productos cárnicos, marisco o platos precocinados, por citar sólo algunos.
¿Cómo funciona la HPP?
El proceso HPP consiste en colocar productos alimenticios sellados en una cámara y aplicarles alta presión -hasta 600 MPa- para destruir los patógenos. Este método es especialmente eficaz para combatir bacterias como Listeria, Salmonella y E. coli, a menudo responsables de enfermedades transmitidas por los alimentos y de retiradas de productos.
Además, la HPP puede prolongar la vida útil de los productos, reducir los residuos y disminuir las posibilidades de retiradas relacionadas con el deterioro. Muchos grandes fabricantes de alimentos ya han adoptado la HPP para mejorar la seguridad y la calidad de los alimentos. El siguiente vídeo ilustrativo explica el funcionamiento y los beneficios de la alta presión.
Caso práctico: HPP en acción
Uno de los ejemplos más destacados del éxito de la HPP es su aplicación en el sector de la charcutería, donde se ha utilizado para reducir el riesgo de contaminación por Listeria. Como se detalla en un reciente artículo de CPC en LinkedIn, la Listeria sigue siendo una preocupación importante tanto para los consumidores como para los productores, pero la HPP ofrece una solución fiable a este problema.
Conclusiones: Un futuro más seguro con HPP
A medida que siguen produciéndose retiradas de alimentos, la industria debe recurrir a tecnologías innovadoras como la HPP para garantizar una mayor seguridad y confianza de los consumidores. La capacidad de la HPP para mantener la calidad de los alimentos al tiempo que elimina eficazmente los microorganismos nocivos la convierte en una solución ideal para muchos tipos de productos.
Al invertir en HPP, las empresas no solo pueden proteger la salud pública, sino también salvaguardar su marca y reducir las costosas retiradas de productos. A finales de 2024, está claro que el futuro de la seguridad alimentaria pasa por tecnologías como la HPP, que prometen una cadena de suministro de alimentos más segura y sostenible.